Y es que aquí nadie se libra de ser feliz, a no ser, claro está, que no quiera serlo.
Hoy en día y en la sociedad en la que estamos inmersos se puede confundir fácilmente la felicidad con el poder adquisitivo o con las cosas que poseemos, reduciendo el concepto de felicidad a su mínima expresión y, quizá también me atrevería a decir que lo estamos distorsionando.
Después de las dos últimas entradas creo que queda claro que la felicidad es un componente exclusivamente humano, es decir, yo no soy más feliz por tener un "iphone" que se conecta a internet, pero sí creo serlo ¿por qué? porque primero, la sociedad, la televisión, el mercado e incluso apple me han hecho creer que necesito un teléfono de última generación y como ya lo tengo soy feliz porque he cubierto lo que me han hecho creer que era una necesidad (absolutamente creada). Y segundo pero no menos importante, al tener un teléfono de última generación me siento más aceptado por la sociedad, a mis amigos les encanta mi teléfono asíque esto hace que me sienta más integrado y querido por mi grupo de iguales.
Vuelvo a repetir que ningún objeto tiene el poder de hacernos felices, sólo las personas gozamos de ese privilegio. Bien, el vídeo de mi segunda entrada habla de que las personas con una amplia red social de amigos, con pareja...son felices, pero no solo son las otras personas las que nos hacen felices o nosotros a ellas, nosotros mismos también tenemos las capacidad de hacernos felices. La principal causa de tristeza o infelicidad son las percepciones erróneas de la realidad, y es que nuestra mente nos puede engañar con mucha sutileza y para evitarlo debemos entrenar nuestro cerebro, la reformulación positiva es un gran aliado, esto se traduciría en mirar las cosas desde un punto más optimista, nada que ver con el conformismo, que a mi manera de ver mata el espíritu. El tener una conducta adaptativa propiciará la reformulación positiva, ya que en un mundo como este, que está en constante cambio la convierte en un arma fundamental para sobrevivir y seguir el camino. El ser capaces de animarnos a nosotros mismos sin necesitar consuelo ajeno en un momento de bajón emocional o tristeza, la creación de planes de futuro en un momento delicado, es decir, elaborar ilusiones, son mecanismos fundamentales para salir de esos puntos depresivos en que nos coloca la vida muchas veces.
Así que sin más dilación te animo a ser feliz y, te animo sobre todo a que compartas esos momento felices con otras personas.
Pilar Cardalliaguet.
eL GLoBo dEl Ojo

viernes, 28 de octubre de 2011
jueves, 27 de octubre de 2011
Decálogo para ser Feliz
* Define claramente cuál es tu proyecto de vida. Ama ese proyecto y procura que uno de sus puntos claves sea hacer el bien. Recuerda que solo tenemos la felicidad que hemos dado.
* La ira, la ansiedad, el sentimiento de culpabilidad, la intolerancia y el odio son los mayores causantes de la infelicidad y la desdicha. Controla bien tus nervios y no permitas que el mal humor y las actitudes violentas te dominen.
* Mantén una buena higiene mental aceptando lo bueno y lo malo de tu pasado. No permitas que el futuro te inquiete y vive siempre un presente de plenitud. La felicidad no está en poseer muchas cosas, sino en el modo de ganarlas.
* Piensa que el bien, la bondad, el éxito y la belleza están en tu interior y en la capacidad de disfrutar de cosas cotidianas y sencillas.
* No olvides jamás que la felicidad camina siempre al amparo y al abrigo de la verdad, la autenticidad y la virtud.
* Disfruta cada día de lo que eres y de lo que tienes. Pero, sobre todo, disfruta sabiendo que con tu vida contribuyes a que otros sean menos desgraciados y un poco más felices.
* La naturaleza está rebosante de vida, de verdad, de bondad y de belleza. Ámala con todas tus fuerzas.
* Busca siempre en todo lugar, en todo momento y situación y ante cualquier persona la paz, la serenidad, y el equilibrio interior como el más preciado logro.
* Nada enriquece tanto como la práctica del perdón y de la generosidad, dar y compartir cosas; salir de uno mismo y sentir los éxitos de los demás.
* No te olvides de perdonarte, de tratarte con ternura, de felicitarte; de valorarte y de ser tu mejor amigo.
Sacado del libro del psicopedagogo Bernabé Tierno.
* La ira, la ansiedad, el sentimiento de culpabilidad, la intolerancia y el odio son los mayores causantes de la infelicidad y la desdicha. Controla bien tus nervios y no permitas que el mal humor y las actitudes violentas te dominen.
* Mantén una buena higiene mental aceptando lo bueno y lo malo de tu pasado. No permitas que el futuro te inquiete y vive siempre un presente de plenitud. La felicidad no está en poseer muchas cosas, sino en el modo de ganarlas.
* Piensa que el bien, la bondad, el éxito y la belleza están en tu interior y en la capacidad de disfrutar de cosas cotidianas y sencillas.
* No olvides jamás que la felicidad camina siempre al amparo y al abrigo de la verdad, la autenticidad y la virtud.
* Disfruta cada día de lo que eres y de lo que tienes. Pero, sobre todo, disfruta sabiendo que con tu vida contribuyes a que otros sean menos desgraciados y un poco más felices.
* La naturaleza está rebosante de vida, de verdad, de bondad y de belleza. Ámala con todas tus fuerzas.
* Busca siempre en todo lugar, en todo momento y situación y ante cualquier persona la paz, la serenidad, y el equilibrio interior como el más preciado logro.
* Nada enriquece tanto como la práctica del perdón y de la generosidad, dar y compartir cosas; salir de uno mismo y sentir los éxitos de los demás.
* No te olvides de perdonarte, de tratarte con ternura, de felicitarte; de valorarte y de ser tu mejor amigo.
Sacado del libro del psicopedagogo Bernabé Tierno.
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